jueves, 3 de febrero de 2022

LA FRANQUICIA DE DIOS

                                                           (CUENTO)


Al principio Dios tan sólo había hecho al Hombre, y no estoy empleando un singular de la palabra, no me refiero al Hombre como especie, sino al estricto caso masculino del término, es decir, sobre la faz de la tierra el único órgano genital era el pene.
 
Para aquella fecha los hombres efectivamente andaban desnudos, pero la época presentaba ventajas hoy extintas. La primera y muy importante, no había mujeres por ahí mirando si uno lo tenía grande. Segunda e igual de importante, tampoco había otros hombres por ahí mirando si uno lo tenía grande.  
 
El Hombre era considerado entre las especies como el mejor vecino, sus excelentes cualidades opacaban por supuesto al dinosaurio, quien se veía en serios problemas por la constante queja acerca de su higiene, pues la verdad sea dicha, es más fácil para el hombre esconder sus excrementos.
 
No obstante, también debió encarar algunos problemas, por ejemplo, larga fue su lucha legal para ser acreditado bajo el titulo de Hombre. Al principio se le conocía como “Homo sapiens”, lo cual, según sus abogados, sugería inclinaciones sexuales aún inexistentes. Pretendiendo jactarse su virilidad se procedió entonces a llamársele “Homo erectus”, pero presentó resistencia por parte de aquellos con disfunción. Fue así que finalmente se concilió un nombre con variante a la partícula “Homo”, quedando finalmente “Hombre”.
 
Todo marchaba bien en la tierra, pero un buen día Dios se cansó de tener que fabricar a cada hombre, era una gratificante labor artesanal, pero la rentabilidad de dicha inversión resultaba irrisoria. El Todopoderoso se vio ante un gran problema; en primera instancia pensó que podría descansar durante algunos años, estaba seguro que la especie no se extinguiría mientras tanto ya que su promedio de caducidad por aquel entonces era de doscientos años. Pero si lo hacia significaba que ya no existirían los jóvenes, y en toda sociedad los jóvenes son imprescindibles para que los mayores se sientan sabios.
 
Entonces le planteó su problema a un amigo íntimo y éste le hablo de una revolucionaria idea empresarial llamada “Franquicia”. A Dios le encantó la sugerencia, pero ¿quién querría meterse en el negocio de la humanidad?, ningún dios en sus cabales, sólo él que lo hacia por amor al arte. Fue así como Dios demostró que su creatividad no sólo le servía para decretar mandamientos que nadie cumple y decidió cederles a los propios hombres una Franquicia. En lo sucesivo ellos mismos se encargarían de su elaboración, podían hacer uso de sus creaciones y estarían disponibles para Dios en caso de necesitarlo.
 
Lo primero que hizo fue abrir un curso para la elaboración de hombres. Las clases eran muy completas, el pensum constaba de: 1. Fisionomía, la importancia de no ser feo. 2. Ensamble de Huesos y Tendones. 3. El Cerebro, aquel sorprendente desconocido. 4. Organos Vitales, Pulmones, Corazón y demás relleno. 5. El Pene, tu mejor amigo. 6. El Pene, no abuses de tu mejor amigo. 7. La excreción, un trabajo sucio pero alguien tiene que hacerlo. 8. Los Músculos, (seminario dictado en un gimnasio, por lo que todos se inscribían, pero nadie iba). 9. La Piel, porque todo lleva un forro. 10. Los Testículos, mucho más que un par de güevas.
 
La primera promoción de expertos en la realización de hombres de inmediato puso manos a la obra. Todo marchaba bien hasta que durante una inspección en la planta, Dios se percato de un problema, los hombres no le ponen el corazón a su trabajo, simplemente cumplen un horario y esperan recibir sus honorarios, motivo por el cual los nuevos hombres llegaban al mundo sin pasión por la vida. Y no faltaron los casos de uno que otro bromista al que le gustaba hacer hombres con desperfectos, en cierta ocasión hicieron a uno con el tronco invertido, el pecho atrás y los omoplatos en el plexo solar, para que así nunca diera la espalda; y a otro le pusieron alas en la cabeza, dizque para que su mente volara. Fue así como Dios se vio en la penosa necesidad de cerrar la planta y volvió al problema inicial.
 
Sumido en la desesperanza tuvo una Epifanía, sí, incluso Dios las tiene, y en su caso no son un milagro. Fue así como se le ocurrió una nueva Franquicia, otra especie humana, pero pensada en portar el milagro de la vida. Le requirió mucho trabajo el hacer un modelo de ser humano similar al hombre, pero con marcadas diferencias y una mejor apariencia, hasta que finalmente el producto de su esfuerzo fue algo divino a lo que llamó Mujer, una verdadera Franquicia suya, pues cada vez que alguien viera a una de ellas en la tierra, sabría que son de Dios la garantía, y en efecto, en lo sucesivo, ellas se encargaron de la vida.

16 comentarios:

  1. Un increíble relato👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻

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  2. Primera vez que ingreso al blog, el cuento me pareció muy divertido. Me imaginé todo esos hombres desperfectos y me saco unas buenas sonrisas, muy buen trabajo seguiré visitando los por aquí.

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    1. Bienvenida Angelica, me alegra que te haya gustado. Aquí en el blog encontrarás textos de diversos estilos, pero todos con mucho cariño.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Feliz de poder leerte mi querido Iván, hermoso cuento, me divertí pensando en los hombres haciendo hombres y el tierno y bello final, gracias por compartir con nosotros otra faceta tuya.

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    1. Mil gracias a uds por ser cómplices de esta otra faceta mía.

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  5. Iván, a esta franquicia le encantó tu cuento. Esta semana, sin intención por tu parte,me has regalado unos sabrosos desayunos. Hoy con tu cuento,¡¡ Qué lujo despertar así!!! Gracias.
    ¿ No se te ha ocurrido hacer segunda parte? Como...Franquicias, Hombres y viceversa?, Je,jeeee.

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    1. Querida Eva, me alegra mucho acompañarte desde mis letras. Voy a pensar en lo que me propones de la continuación, jeje.

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  6. Me encanto este cuento y aun mas llegar a este espacio donde dejas ver otra faceta y talento tuyo! Me encantan las letras y disfrute leerte y ahora voy a leer todos los anteriores!

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    1. Qué alegría Paola, espero que disfrutes la lectura de los demás.

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  7. Es tu segundo cuento que leo y puedo decirte que me encantó!!! Pude imaginarme cada situación incluso reírme con los apuntes graciosos 😁 Tenés en esta franquicia una fans ratificada tuya!!!

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