lunes, 24 de julio de 2023

LOS ROMPECABEZAS

                                                     (CUENTO)


Llevaban a cabo un extraño juego de enamorados propuesto por el mejor amigo de ambos; él se encontraba concentrado en armar el rompecabezas que la dibujaba a ella, lo hacía sin una imagen guía, tan sólo recurría al retrato en su pensamiento para construirla y no dudaba ni por un segundo ser capaz de hacerlo por dicho medio.

 

Ella mientras tanto, tenía frente a sí un rompecabezas con el dibujo de él y hacía lo propio; todos sus pensamientos fluían hacia la imagen de su amado que llevaba tatuada en el pensamiento, y al igual que él, estaba totalmente convencida de tener en dicha imagen todas las repuestas para el reto impuesto.

 

Ambos se encontraban próximos a terminar el juego, pero ocurrió al mismo tiempo que se sintieron confundidos respecto a partes especificas del retrato, una vez más se concentraron en visualizar en sus mentes la imagen del ser amado; aparentemente unas cuantas piezas no coincidían, pero se negaban a rendirse y aceptar lo que les había dicho su amigo, que no serían capaces de armarlos acudiendo simplemente al recuerdo mental sin pedir ayuda al otro.

 

Al cabo de un largo tiempo ambos desistieron de su orgullo y cedieron intrigados por el misterio, se pidieron ayuda mutuamente y descubrieron que cada uno tenía las piezas que faltaban al otro, entonces sonrieron pues comprendieron en qué consistía el juego. El amor suele convertirse en el rompecabezas de nuestras vidas porque sólo pensamos en el ser amado y su imagen fija en nuestra mente nubla esa capacidad de ver que podemos estar equivocados.